La cuarta pirámide

La imagen del complejo de pirámides de Giza, la única maravilla del mundo antiguo que aun perdura no necesita presentación. Sin embargo, estas tres pirámides, construidas por tres generaciones sucesivas de faraones (Keops, Kefrén y Micerino) tendrían una hermana poco conocida.

Esta cuarta pirámide habría sido construida por el faraón Dyedefra, hijo de Keops y sucesor de éste en la dinastía. El monumento funerario fue construido en la zona de Abu Rawash, 8 kilómetros al norte de Giza, en torno al año 2250 a.C., demorando unos ocho años en su construcción. El motivo de la distancia que la separa de la Gran Pirámide habría sido la búsqueda de Dyedefra por diferenciarse de su padre y superar sus logros. El elevado terreno elegido le permitiría estar más cerca del dios Ra.

Según recientes descubrimientos esta pirámide se elevó unos 154 metros de altura, superando a la de Keops por escasos metros. Cada una de sus caras medía unos 122 metros y su construcción se realizó con un ángulo de inclinación de 64 grados, superior al valor que ostentan las pirámides de Giza.

Para construirlo habrían traido miles de bloques de piedra caliza y granito rojo desde Asuán, situado 800 kilómetros río abajo. Estos bloques, que podían superar las veinte toneladas, eran transportados en barcazas a través del cauce del Nilo, y siendo necesarias mas de trescientas personas para desplazarlos. El granito fue utilizado para realizar el revestimiento de la pirámide, que incluía una aleación de oro, plata y cobre, la cual reflejaba los rayos solares. Se cree que a lo largo del proyecto habrían trabajado unos 15000 hombres, en su mayoría agricultores, que eran desplazados de sus cultivos por las periódicas crecientes del Nilo.

En la actualidad el complejo funerario se encuentra en ruinas, las cuales no superan los diez metros de altura. Las causas no eran de todo claras, y especulaciones en torno a venganzas familiares (Dyedefra fue sicedido por su hermano Kefrén) y fallas arquitéctonicas se multiplicaron.
Sin embargo, la causa era aún mas pueril; básicamente, la causa reside en las ansias de superación del faraón. Debido a la calidad de los materiales utilizados en la construcción, superior a la de aquellos empleados en el complejo de Giza, los romanos y gobernantes posteriores la desmantelaron progresivamente, empleando sus bloques en la construcción de la ciudad de El Cairo.