Enamorada del muro

El amor es algo misterioso, que ataca de repente y en formas diversas. Si no creen que sea así, miren el caso de Eija-Riitta Berliner-Mauer, una sueca de 54 que afirma estar casada en primeras nupcias con el Muro de Berlín.
"Me enamoré del Muro cuando lo vi por primera vez en la tele. Yo tenía siete años y fue un flechazo” explica Eija, que lleva el apellido de su marido (Berliner-Mauer significa “Muro de Berlín”).
Mientras sus amigas forraban sus carpetas con fotos actores, Eija coleccionaba fotografías del Muro desnudo. Eija viajó numerosas veces a Berlín para visitar el Muro, concretando la unión con su actual marido durante la sexta visita, en una ceremonia familiar realizaeda el año1979, fecha desde la que usa el apellido de casada.
Afirma nunca haber mantenido relaciones sexuales con humanos, pero que mantiene una relación amorosa “plena” con el Muro. “Encuentro muy sexis los objetos planos con líneas horizontales largas. La muralla China es muy atractiva, aunque muy gorda, mi marido está mucho más bueno” comenta Eija.
"Como cualquier pareja, tenemos nuestro momentos buenos y malos".
Desde que el Muro de Berlín fue derribado en 1989, Eija no ha vuelto a la ciudad germana y guarda en su casa réplicas del Muro en su esplendor.
Vi por televisión como una horda frenética asesinaba a mi marido, fue algo horrible. Apagué la tv, corrí la cortina, cerréla puerta con llave y me encerré enmi misma, no podía ver lo que le hacían."
Sus amigos comentan que ahora se ve con la valla del jardín de un vecino, pero son sólo rumores.

"Los seres humanos se creen superiores, deberían aprender a tratar a los objetos con más respeto", comenta en su página web.

Así que ya saben, si se sienten solos, deprimidos, una relación tormentosa con un objeto puede ser una buena solución.