
Merryweather ejercía la medicina en las costas de North Yorkshire y, como

Persona educada y observadora, Merryweather había notado como las sanguijuelas se intranquilizaban cada vez que se aproximaba una tormenta eléctrica, y decidió sacar provecho a esa extraña conducta.
El dispositivo

Las sanguijuelas comenzaban a trepar por las paredes de la botella, hasta llegar al tope, introduciéndose en un estrecho tubo de latón. En la medida que cada sanguijuela hacía esto, desplazaba un pequeño martillo hecho de huesos de ballena, el que a su vez estaba conectado a una cadena que se unía a una campana central. Con el golpe de la campana, se anunciaba la cercanía de una tormenta.

Merryweather realizó las gestiones necesarias para persuadir al gobierno inglés que instalara su invento a lo largo de toda la costa de Inglaterra, para así ayudar a la navegación. Pero en esos tiempos ya se había descubierto el barómetro de mercurio, con lo que el "Indicador de Tempestades" quedó en el olvido.
0 comentarios:
Publicar un comentario