Un grupo de científicos ingleses buscó recientemente compro- bar las diferencias en el comportamiento del cerebro humano según el género. Para ello estudiaron la dificultad de niños de ambos sexos para recorrer un laberinto de arbustos, escogiendo el perteneciente a los jardines del palacio de Blenheim, en Oxfordshire.
La prueba se inciaba cuando un niño de cada sexo ingresaba en el laberinto, y tras recorrer unos cuantos metros se encontraban con un mirador de madera, desde el cual podían observar toda la extensión del predio. Luego continuaban por los senderos hasta llegar al centro.
Una vez que todos los participantes realizaron la prueba, descubrieron que en término medio los varones llegaban al centro del laberinto más rápidamente.En los varones, la corteza cerebral es más gruesa en el hemisferio derecho del cerebro, que rige el pensamiento espacial. Por eso su estrategia se basa en crear una imagen mental del laberinto completo, usando un punto de referencia como el sol, para determinar su ubicación.
Las niñas presentan un mejor desarrollo del cuerpo calloso, el cual conecta ambos hemisferios. Esto les permite implicar con mayor facilidad el lado izquierdo, responsable del lenguaje articulado. De esta forma, se guían ubicando detalles marcas en el terreno, que puedan describir mediante palabras, y determinando direcciones para ir de una marca a la siguiente.
Debido a las características de laberinto, que no presentaba distinciones demasiado apreciables entre los corredores ( no había por ende marcas claras con que guiarse para las niñas), los varones pudieron adaptarse mejor al escenario, y de allí los resultados obtenidos.
0 comentarios:
Publicar un comentario